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Evaluaciones De Materialidad

Evaluaciones de materialidad: por qué son importantes en la estrategia de sostenibilidad corporativa

Las evaluaciones de materialidad desempeñan un rol de alta relevancia en la estrategia de sostenibilidad corporativa de cualquier organización. Son fundamentales para priorizar objetivos estratégicos dentro de las políticas ESG.

En el marco de la Unión Europea, además, la directiva CSRD propone una evolución en cuanto a las evaluaciones de materialidad al incorporar el concepto de “doble materialidad” y extender la evaluación a la cadena de valor.

Esto permite a la organización comprender la importancia real de ciertas cuestiones e identificar problemas de los que no es directamente responsable, pero sobre los que puede actuar al enfocar acciones para solucionarlos en algún punto de la cadena de valor.

Por qué son importantes las evaluaciones de materialidad para la estrategia de sostenibilidad

Las evaluaciones de materialidad generan confianza en las partes interesadas en la organización. Transmiten transparencia y muestran que la organización se toma en serio todos los aspectos que pueden impactar en sus indicadores de sostenibilidad.

Al comprender los temas materiales que tienen capacidad para afectar la sostenibilidad, la organización puede definir un plan de trabajo para solucionar problemas, eliminar riesgos y mejorar los indicadores.

El proceso requiere la participación de las partes interesadas, sobre todo si estas forman parte de la cadena de valor. Esa participación fomenta la focalización estratégica y eficaz de esfuerzos y recursos.

Quiénes son y como influyen las partes interesadas en las evaluaciones de materialidad

La participación de las partes interesadas en la evaluación de materialidad busca establecer cómo estas se ven afectadas por las operaciones de la organización o cómo son ellas las que afectan a los objetivos de sostenibilidad de la organización. Las partes interesadas pueden ser internas o externas:

  • En el interior de la organización, la más visible es la formada por los empleados, pero no es necesariamente la más relevante. Áreas, departamentos, la Alta Dirección o sindicatos, entre otros, pueden ser partes interesadas internas.
  • En el exterior, sin duda, las partes interesadas más relevantes están en la cadena de valor. Organismos reguladores, organizaciones comunitarias o inversionistas también se ubican en este segmento.

La influencia de las partes interesadas en las evaluaciones de materialidad es definitiva: su aporte permite obtener una perspectiva integral, holística y coherente sobre los riesgos, la eficacia de los controles y los desafíos que enfrenta la sostenibilidad de la organización.

Las preocupaciones de las partes interesadas serán casi tan diversas como su número. Para los empleados, las condiciones de seguridad y salud son prioritarias. Los inversores demuestran mayor interés por los resultados financieros y las expectativas comerciales. Por su parte, los clientes piensan en la calidad y los representantes de las comunidades en el medio ambiente.

Las evaluaciones de materialidad tienen la capacidad para satisfacer todas esas expectativas, generando confianza y atendiendo las solicitudes de personas, agrupaciones u organizaciones que son vitales para el funcionamiento de la organización.

¿Qué tipos de materialidad existen?

Los tipos o niveles de materialidad se diferencian por el grado de minuciosidad o precisión que adoptan en su enfoque. Básicamente, se distinguen tres tipos:

1. Materialidad simple o única

También conocida como materialidad financiera, se enfoca en la afectación económica que sufre la organización al ser impactada por riesgos y oportunidades ESG. Es un tipo de evaluación interna que se limita al aspecto financiero.

2. Doble materialidad

La doble materialidad asume un enfoque integral y holístico. Es importante porque es el tipo de evaluación que solicita la directiva CSRD y porque además de ocuparse de los impactos ambientales, sociales y de gobernanza que afectan a la organización, se preocupa por la influencia de sus operaciones en el entorno ambiental inmediato, así como su impacto en el desempeño financiero y en la reputación.

3. Triple materialidad

La triple materialidad considera y analiza expectativas e impactos locales y su incidencia en cadenas de valor globales. Además, incorpora el contexto de la organización como factor clave de evaluación. Así, las condiciones económicas, sociales y medioambientales se consideran en este tipo de evaluación.

Qué tipo de evaluaciones de materialidad elegir

El tipo de evaluación que realizará la organización dependerá de las solicitudes del estándar de presentación de informes ESG, ya sea voluntario u obligatorio:

  • La materialidad financiera, o simple, se adecúa a los requisitos de TCFD (Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras Relacionadas con el Clima) y con las IFRS S1 y S2, así como las SASB (Junta de Normas de Contabilidad de Sostenibilidad).
  • GRI (Iniciativa de Reporte Global), por otra parte, utiliza la doble materialidad o materialidad de impacto. Lo importante es saber qué espera el estándar, qué información requiere y cuál de los tipos de evaluación se acomoda a las solicitudes de divulgación.
  • Las evaluaciones de materialidad también pueden ser solicitadas por organismos reguladores o legislación. CSRD es la única normativa de amplio alcance que exige la doble materialidad y que la extiende a la cadena de valor, de acuerdo con ciertos criterios o umbrales.

Consejos para realizar evaluaciones de materialidad efectivas y transparentes

Los resultados de las evaluaciones de materialidad desencadenan una serie de eventos, por lo general positivos, para la organización. Son estudios relevantes para la gestión ESG y para el cumplimiento de la empresa. Por eso, es fundamental destinar a la tarea los recursos y esfuerzos necesarios. En este sentido, conviene tener en cuenta dos recomendaciones para obtener evaluaciones efectivas y transparentes:

1. Realizar evaluaciones periódicas y constantes

La evaluación de materialidad no es una tarea de una sola ocasión. Como mínimo, la evaluación se realizará en concordancia y sincronía con la presentación de informes financieros y contables. Las condiciones financieras, climáticas, sociales cambian para todos. La evaluación de materialidad exige reflejar el momento exacto y por ello necesitan actualización constante.

2. Incorporar tecnología

Algunas empresas tercerizan la realización de la evaluación de materialidad. Si el consultor contratado es un experto, los informes serán adecuados, transparentes y eficaces. Pero aun así, será difícil alcanzar el nivel adecuado de comprensión sobre los impactos, riesgos y oportunidades.

Es posible, incluso, que tampoco se obtenga un nivel de transferencia de conocimiento aceptable. Y a ello se suma que la información y los datos residirán en servidores externos fuera del control de la organización. Los inconvenientes se pueden salvar aprovechando los beneficios de la tecnología.

Plataforma Tecnológica ESG

La Plataforma Tecnológica ESG es un desarrollo de última generación, asistido por Inteligencia Artificial. Se ha desarrollado con el objetivo de facilitar a las organizaciones realizar muchas de las tareas que implica la Gestión ESG, entre ellas la evaluación de materialidad, la participación de las partes interesadas o la presentación de informes ESG.

Esta solución permite a la organización mantener el control durante todos los procesos, obtener informes en tiempo real, garantizar el cumplimiento y, sobre todo, generar un proceso de mejora continua. Es, además, un software que se adapta a las necesidades de organizaciones de todo tipo. Puedes obtener mucha más información sobre su funcionamiento, solo tienes que contactar con nuestros consultores.

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