La norma en cuestión tiene como objetivo establecer requisitos de divulgación para que los usuarios comprendan el impacto de una empresa en el uso de recursos y su compromiso con la economía circular. Se abordan aspectos como la eficiencia en el uso de recursos, medidas para prevenir o mitigar impactos negativos, adaptación a la economía circular, gestión de riesgos y oportunidades, así como los efectos financieros a corto, medio y largo plazo.
La norma se centra en la entrada y salida de recursos, incluyendo la circularidad de estos, y aborda la economía circular como un sistema que busca maximizar el valor de productos y recursos a lo largo de su ciclo de vida, siguiendo principios como durabilidad, reutilización, reciclaje y ciclo de nutrientes. Además, se basa en marcos legislativos y políticas de la Unión Europea relacionados con la economía circular. En términos de evaluación, la norma se apoya en la identificación de flujos físicos de recursos, materiales y productos generados y utilizados por la empresa.